Mis padres me echaron de casa cuando era joven, d谩ndome una dura lecci贸n sobre la independencia. Lo que no sab铆an era que estaban sembrando las semillas de mi venganza. Durante a帽os, he estado preparando mi plan con una precisi贸n meticulosa: convertirme en la mujer de sus sue帽os para luego usar esa transformaci贸n para mi propia venganza.
El d铆a de mi boda hab铆a llegado, y con 茅l, el momento culminante de mi plan. Cada detalle de la ceremonia estaba meticulosamente dise帽ado para asegurar mi triunfo y la culminaci贸n de mi venganza. El anillo en mi dedo simbolizaba no solo mi uni贸n con 茅l, sino tambi茅n el 茅xito de mi venganza, el producto final de una transformaci贸n completa y devastadora.
La transformaci贸n no fue sencilla. Mi primer paso fue someterme a una cirug铆a de feminizaci贸n facial que remodel贸 mi estructura 贸sea para darle un aspecto m谩s delicado. Despu茅s, pas茅 por una serie de procedimientos est茅ticos para suavizar mi piel, agrandar mis pechos y ajustar mi cintura, todo mientras manten铆a mi apariencia lo m谩s natural posible.
No contenta con esto, tambi茅n me somet铆 a un programa intensivo de terapia hormonal para transformar mi cuerpo. La testosterona que antes me daba fuerza y masculinidad fue reemplazada por estr贸genos, esculpiendo mis caderas y trasero para que se volvieran voluptuosos y femeninos. Durante meses, me somet铆 a dolorosos tratamientos de depilaci贸n y me mantuve al borde de la perfecci贸n est茅tica. Adem谩s, la cirug铆a de reasignaci贸n de g茅nero complet贸 el proceso, transformando mis genitales en una versi贸n completamente femenina, mientras que las inyecciones continuas de estr贸geno ayudaron a mantener una apariencia femenina.
Para justificar el desgaste de mi cuerpo con el tiempo, adopt茅 la identidad de Sophia, una mujer madura y seductora. Mi nuevo yo era un contraste llamativo con la persona que era antes. Mi piel radiante y mi figura voluptuosa eran el resultado de a帽os de procedimientos meticulosos. La tercera vez fue la vencida; mi papel como Sophia lo atrap贸 por completo. 脡l se enamor贸 perdidamente de m铆, y lentamente fui desenterrando la brecha entre 茅l y su eesposa y su matrimonio de treinta a帽os.
Recuerdo los primeros momentos inc贸modos de mi coqueteo con 茅l. Inicialmente, mi intento de seducci贸n fracas贸. pero despu茅s nos volvimos mas cercanos, hasta que lo tube comiendo de la plama de mi mano, lo convenci de divorciarse.
Ahora, mientras me miro en el espejo con una mezcla de orgullo y anticipaci贸n, siento la lujuria y el triunfo palpitar en mi interior. La ceremonia estaba en pleno apogeo, y los invitados disfrutaban, ajenos al verdadero motivo detr谩s de mi sonrisa y de la intensidad en mi mirada. Mi libido, a煤n activa a pesar de los a帽os de hormonas, se manten铆a fuerte, pero hoy, el deseo de venganza eclipsaba todo lo dem谩s.
Cuando el momento fuera el adecuado, me levantar铆a para hacer un anuncio. La revelaci贸n no ser铆a simplemente sobre mi amor por 茅l, sino una exposici贸n p煤blica de la verdad: mi identidad oculta, el plan meticuloso que hab铆a ejecutado y el dolor que hab铆a causado. Esperar hasta el final de la noche ser铆a m谩s dulce. Cada segundo de suspense alimentaba mi satisfacci贸n. El momento de la venganza estaba cerca, y nada podr铆a detenerme ahora.
Vaya venganza
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