Sara estaba disfrutando de su día libre cuando alguei nla saludo en la calle, Era Daniel, su exnovio de la universidad. La invitaba a tomar un café, y aunque se sorprendió, decidió aceptar

por pura curiosidad. Durante el encuentro, la conversación fluyó fácilmente, recordando viejos tiempos y riendo de anécdotas pasadas.

Sin embargo, en un giro inesperado, Daniel sugirió retomar su relación. Sara, sin dudarlo, le explicó que ahora estaba felizmente casada y tenía un hijo. Daniel fingió aceptar la situación con madurez, pero en el fondo, un resentimiento oscuro comenzaba a hervir.

Una semana después, mientras Sara estaba en casa con su hijo, notó algo extraño. Su hijo adolecente, que siempre había sido una copia de su padre, empezaba a cambiar. Sus rasgos se suavizaban, su cabello se alargaba y aclaraba, hasta que finalmente, ante los ojos atónitos de Sara, se convirtiendose poco a poco en una versión idéntica a ella misma.

Sara intentó acercarse a su hijo, en este cambio, pero Era claro que no solo su apariencia había cambiado; Daniel había usado un hechizo para lavar el cerebro de su hijo, implantando en él los recuerdos y la personalidad de Sara, de una forma retocida, hacie doll creer que ella es sara y que daniel eera el amor de su vida.

Desesperada, Sara intentó revertir la magia, pero fue en vano. Con el paso de los dias su hijo, ahora transformado cada ves mas tranformado en una copia perfecta de ella, comenzó a mostrar un comportamiento rebelde. A escondidas, intentaba contactar a Daniel, saliendo de casa sin que Sara lo supiera. Aunque Sara intentaba prohibirle cualquier contacto con él, su hijo se volvía cada vez más desafiante.

Una noche, la situación llegó a su punto crítico. Sara encontró su armario revuelto, con varios de sus vestidos, faldas y lencería desaparecidos. Al asomarse a la habitación de su hijo, lo encontró vacío. Su corazón se hundió al darse cuenta de lo que había ocurrido. Su hijo, ahora una versión perfecta de ella, había tomado su ropa y se había escapado con Daniel.

El camino hasta la casa de Daniel fue una tortura para Sara. La incertidumbre y el miedo la corroían por dentro. Al llegar, vio a Daniel esperando en la puerta, una sonrisa triunfante en su rostro.

 "Ahora tengo lo que siempre quise," dijo, abrazando a la nueva "Sara", que se acurrucó a su lado con una obediencia perturbadora. Vestida con las premdas de  de Sara, la nueva versión de ella lucía perfecta, una réplica sin fallos.

Sara intentó razonar con su hijo, pero cada palabra parecía rebotar en una pared invisible. La nueva "Sara" la miraba con una mezcla de indiferencia y superioridad, como si ya no hubiera ningún lazo entre ellas. "Él me entiende mejor que tú," dijo fríamente la nueva "Sara", ajustando uno de los collares que pertenecía a su madre.

En un último intento desesperado, Sara trató de lanzar un hechizo para revertir la transformación, pero Daniel fue más rápido. Con un movimiento de su mano, la magia de Sara fue neutralizada, dejándola impotente. "Ya no puedes hacer nada," susurró Daniel con una satisfacción siniestra. "Ella es mía ahora."

Sara, atrapada en su propio hogar, solo pudo ver cómo Daniel se llevaba a su nueva esposa, una copia perfecta de ella misma, mientras su verdadero hijo estaba perdido, transformado y manipulado por una venganza cruel. Las palabras de Daniel resonaban en su mente, haciendole sentir impotencia.

Días después, Sara comenzó a recibir mensajes de Daniel. Cada uno venía acompañado de una foto, cada una más cruel que la anterior.

La primera foto mostraba a lla copia de sara den la cosina del la casa de daniel un foto algo casual, y la copia sonreía radiante, con un brillo en los ojos que parecía autentico. La leyenda decía: "Ella sí me ama y está dispuesta a todo por mí".

La siguiente foto mostraba a la copia de Sara limpiando la casa, vestida con  ropa cómoda y muy probocativa. Estaba fregando el piso de rodillas, con una expresión de dedicación en el rostro. La leyenda decía: "Es una buena ama de casa... material de esposa".

Luego, una foto de la copia de Sara y Daniel teniendo sexo en su dormitorio. La imagen era explícita, mostrando a daniel penetrandola por el ano, ambos en éxtasis. La leyenda decía: " tu siempre me negarte el anal pero ella, Su apetito sexual es increíble".

La siguiente foto mostraba a la copia de Sara con su vagina rebosante de semen, y la leyenda decía: "Ella sí está dispuesta a ser la madre de mis hijos...". La mirada de satisfacción en su rostro hacía que Sara sintiera una mezcla de horror y traición.

Finalmente, la última foto era la más devastadora. Mostraba una prueba de embarazo positiva en la mano de la copia de Sara, con la leyenda: "Pronto seremos una familia feliz y este es el primero de muchos... hijos".

Cada foto era un recordatorio cruel de la vida que Daniel estaba construyendo con su hijo transformado. Sara sentía cómo su mundo se desmoronaba, Pero a pesar de todo, Sara no se rendiría. Sabía que debía luchar,pero no sabia que hacer...